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viernes, 6 de mayo de 2011

Brahms. Sinfonía nº 4. Wilhelm Furtwängler. Orquesta Filarmónica de Berlín. 1948.


Continuamos con las obras sinfónicas de Brahms dirigidas por Furtwängler para el sello EMI. En esta ocasión dejamos el disco con la interpretación soberbia y extraordinaria de la Cuarta Sinfonía, obra muy querida por el gran director alemán y una de las que mejores acercamientos tuvo por parte del mismo. 

La Sinfonía nº 4 de Brahms fue compuesta en los veranos de los años 1884 y 1885 durante las vacaciones estivales del compositor en Mürzzuschlag teniendo su estreno, en manos del propio compositor, el 24 de octubre de 1885 en Meiningen. Hans Richter fue el encargado de la dirección en su estreno en Viena un poco menos de un año después.


Obra final en su catálogo sinfónico es la más sombría de las cuatro sinfonías del maestro, una especie de despedida formal del mismo, un canto de cisne con marcado carácter serio y trágico en todo su desarrollo. Quizá la más austera y estricta de las cuatro presenta sin embargo una belleza profunda, monumental, sobrecogedora. Es una obra maestra de perfección en cuanto a la estructura musical, maravillosa y genial; un ejemplo sencillamente prodigioso de la forma compositiva de Brahms, de su capacidad de desarrollar los temas básicos y sencillos con una elaboración estupenda y bellísima de melodías encantadoras y contrapunto excepcional. La combinación de pasajes solistas es increíblemente bella y tiene algunos de los momentos más bellos del sinfonismo (maravillosas trompas, maderas y cuerdas por ejemplo en su segundo movimiento, increíblemente bello). Su tercer movimiento siempre se ha considerado como el único Scherzo de la composición sinfónica de Brahms, con un magnífico ritmo de marcha y un color musical genial y bellísimo algo diferente a los presentados habitualmente en el romanticismo germánico. Su cuarto movimiento es una maravillosa síntesis y ejemplo de perfección en el manejo de las variaciones musicales con las que Brahms elabora un monumental e increíblemente perfecto discurso musical, arrebatador y incontenible, basado en la Passacaglia barroca y desarrollado perfectamente en 30 variaciones y una coda final. Una obra maestra desde su impactante inicio en las bellísimas maderas hasta su conclusión final con la repetición del tema inicial. Uno de los finales más difíciles que puedan existir y que logran llevar a tu corazón unas impresiones y sensaciones indescriptibles. Soberbio.


La interpretación de Furtwängler y los músicos berlineses es sencillamente magistral. No tiene desperdicio, Es de una intensidad opresiva y de una perfección constructiva única. Te llenas de vida, de sentimiento, de emoción. Te trasladas a un mundo sensitivo absolutamente increíble. Los instrumentistas de la Filarmónica de Berlín están arrebatadores como lo está el maestro Furtwängler. La capacidad de transmitir el alma de esta obra de madurez de Brahms creo que no ha sido igualada por director alguno (me deben perdonar la aseveración los admiradores de Szell, de Giulini, de Jochum, de Bernstein, de Kempe, de Karajan, etc.). Sencillamente esta obra pertenece al espíritu de Furtwängler, a su grandeza humana, a su capacidad de transmitir sensaciones ocultas y resulta imposible apartarse de su discurso musical que plantea un recorrido perfecto por la musicalidad, el sentimiento profundo, el sentido y la belleza de las notas del maestro Brahms.


Una grabación maravillosa, de una obra increíble, por una director en estado de gracia y por unos músicos dignos de admiración. Una perfecta puesta en escena y en valor de una obra difícil como pocas y bella como ninguna. Una gran alegría que tengamos este testimonio maravilloso. Estoy convencido que en su escucha van a poder saborear momentos mágicos de expresividad, de dulzura, de intensidad dramática, de dinamismo, de continuidad expresiva, de sentimiento y de calidad musical y humana. 

Por favor disfrútenla. Creo que merece la pena. Sus corazones se lo agradecerán.

Una magnífica ocasión para celebrar el venidero cumpleaños del maestro Brahms para el próximo día 7 y que lo haremos con las dos obras que faltan, el Requiem y el Concierto para Violín junto con el Doble Concierto.





Brahms
Sinfonía nº 4
Wilhelm Furtwängler
Orquesta Filarmónica de Berlín
Grabación: 24 de octubre de 1948. Berlín, Titania Palast. Vivo







8 comentarios:

  1. ESTIMADO JULIO: ANTE TAN ENTUSIASMANTES COMENTARIOS NO ME PUDE RESISTIR A ESCUCHAR ESTA VERDADERAMENTE MAGISTRAL OBRA. DEBO COINCIDIR QUE ES UNA VERDADERA MARAVILLA. PERSONALMENTE "DESCUBRI" A FURTWANGLER EN UNA VERSION MARAVILLOSA DEL CONCIERTO PARA VIOLIN Y ORQUESTA EN RE MAYOR OP 61 DE BEETHOVEN Y ME MARAVILLO REALMENTE. UN SEÑOR DIRECTOR. (LO ACOMPAÑABA EN LA VERSION DE 1953 NADA MENOS QUE Y. MEUHIN) REALMENTE DISFRUTABLE. MUCHAS GRACIAS JOSE

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  2. Querido Jose, un placer leer tus palabras. Me grada muchísimo que disfrutaras de esta interpretación que como bien dices es una de las grandes al igual que ese maravilloso Concierto de Beethoven. La pareja formada por estos dos grandes hombres, dio verdaderas muestras de humanidad y una gran lección de amor y tolerancia.

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  3. Actualizada entrada Brahms. Sinfonía nº 4. Wilhelm Furtwängler. Orquesta Filarmónica de Berlín. 1948.

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  4. En hora buena, encuentro alguien que tiene ese singular gusto por esta sinfonia de Brahms, y el particular bajo la dirección de furtängler.
    Los archivos ya no estan disponibles, seria posible que los volviesen a subir?

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  5. can you re-upload it? Thank you!

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  6. Actualizada la entrada/Updated entry: Brahms. Sinfonía nº 4. Wilhelm Furtwängler. Orquesta Filarmónica de Berlín. 1948.

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  7. Hello Julio,

    Thank you very much! :-)

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