Queridos amigos os dejo un disco que creo merece la pena escuchar con atención. Corresponde a una grabación en directo en el Festival de Salzburgo de 1972 de obras de Bartók y Schumann. Se unen para la ocasión dos grandes músicos. De un lado Karajan y de otro Anda. Acompañan a ambos una fenomenal Staatskapelle Dresden. La ocasión brindó una aproximación genial a las dos piezas ofrecidas, de una lado un logradísimo Concierto para Piano nº 3 de Bartók (la única obra del autor que ofreció Karajan en Salzburgo) y de otro una apasionada interpretación de la Cuarta sinfonía de Schumann.
El Concierto para Piano nº 3 de Bartók es quizá el más delicado, el menos sombrío y el que posee una mayor sutileza sonora casi impresionista o neoclásica. Fue compuesto por Bartók en la etapa final de su vida y dedicado a su mujer Ditta Pásztory-Bartók, pianista también como Bartók. El tercer y último movimiento del concierto quedó inconcluso a la muerte del autor el 26 de septiembre de 1945 y fue su alumno, Tibor Serly, el responsable de completar los últimos 17 compases. El Concierto se estrenó en Filadelfia el 8 de febrero de 1946 con György Sandor al piano y la Orquesta de Philadephia dirigida por Eugene Ormandy.
La interpretación ofrecida en el disco por Karajan, Anda y la Staatskapelle Dresden es bellísima. Orquestalmente es una maravilla escuchar esta orquesta, de una enorme belleza sonora y que logra un acompañamiento perfectamente armonioso a la interpretación emotiva, íntima y delicadísima de un Anda fenomenal (un verdadero maestro en Bartók) sin olvidarnos de un Karajan genial refinado, sutilísimo y logrando un equilibrio musical maravilloso. Una verdadera obra de arte.
El disco se cierra con una interpretación memorable de la Cuarta Sinfonía de Schumann (en su primera versión de 1841 en cuatro movimientos).
Reconozco que en otras interpretaciones de Karajan su Schumann no me "impacta" de forma particular pero en esta ocasión el juego sonoro y orquestal que obtiene de esa fenomenal orquesta de Dresde me hace sentir emoción y pasión; logra extraer una expresividad enorme en cada uno de los movimientos junto con una interpretación sin tacha de todos y cada uno de los instrumentistas. Combina el lirismo, la pasión y la fuerza de una forma increíble. Toda la obra está perfectamente lograda, desde el principio al fin; particularmente encantador su segundo movimiento y enorme el último (me sigue pareciendo uno de los finales sinfónicos más bellos existentes). Merece la pena escuchar esta aproximación de Karajan.
Bartók
Concierto para Piano nº 3
Herbert von Karajan
Géza Anda
Staatskapelle Dresden
Salzburgo, 13 de agosto de1972
Schumann
Sinfonía nº 4
Herbert von Karajan
Staatskapelle Dresden
Salzburgo, 13 de agosto de 1972
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