Mis queridos amigos, esta semana por pura coincidencia me acabo de dar cuenta de que llevamos varias entradas, bien nuevas o bien renovaciones (estoy procurando volver a tener los archivos actualizados, les pido paciencia por ello ya que es una tarea que lleva mucho tiempo), que nos han presentado o rescatado alguna de las Novenas clásicas de la historia musical y con un significado especial en dicha historia y en el corazón de muchos: Novena de Mahler y Novena de Bruckner.
No podía dejar pasar la ocasión para dejar otra Novena, quizá la precursora formal y espiritual de todas ellas y que sembró la semilla de la desconfianza o el miedo posterior a ese número. No es otra que la Novena del gran Beethoven, la obra más sublime que quizá se pueda escuchar.
Y les dejo un disco maravilloso, muy criticado en su momento y aún hoy en día por su "lentitud" que algunos han llegado a calificar de aburrimiento. En mi humilde entender es todo lo contrario, una interpretación pausada eso sí pero detallada de forma milimétrica, con una densidad de texturas impresionante, exposición clarísima y preciosa musicalidad.
Última grabación del maestro Böhm, esta Novena de Beethoven es su despedida fonográfica, nos presenta un Böhm que ya muy mayor no hace más que dejarnos su visión de una obra que años antes y con la misma orquesta tenía planteamientos muy similares y que en esta ocasión lleva más al extremo, casi estirando el discurso musical de Beethoven para clarificarlo y ofrecerlo nítido, sencillo, uniforme y bellísimo.
Un disco realmente maravilloso y que merece la pena escuchar, una Novena de Beethoven plástica, lírica, puntillosa, aplastante y rigurosa que nos permite disfrutar de una forma pocas veces escuchada de un sentido musical humano y absoluto.
¿Lenta? Creo que no, en la justa medida del deseo del maestro Böhm. Preciosa, sí, a más no poder con una Filarmónica vienesa perfectamente grabada que ofrece su inconfundible sonido de maderas y cuerdas como pocas veces lo ha hecho. Y un cuarteto vocal maravilloso, grandes cantantes y grandes conocidos del maestro Böhm. Una verdadera delicia.
Curiosamente fue una de las primeras Novenas de Beethoven que adquirí en CD, creo recordar nada más se publicó, y desde entonces, siempre la he escuchado al menos una vez al año. Terapia o puro placer. O simplemente igual es que las cosas bellas, sencillas y expuestas de forma clara y majestuosa requieren que de vez en cuando nos volvamos de nuevo a ellas.
Disfruten de esta magnífica obra, la Novena por antonomasia, la Novena del gran Beethoven.
Beethoven
Sinfonía nº 9
Orquesta Filarmónica de Viena
Karl Böhm
Agrupación para conciertos del Coro de la Ópera Estatal de Viena (Konzertvereinigung Wiener Staatsopernchor), Walter Hagen-Groll director
Jessye Norman, soprano
Brigitte Fassbaender, alto
Plácido Domingo, tenor
Walter Berry, barítono
Grabación:
Viena, Musikverein, Grosser Saal, noviembre de 1980
Esta novena es sencillamente excelente. Aún hoy la escucho en vinilo, por recordar viejos tiempos. Saludos.
ResponderEliminarGracias querido Sergio. A mí me tocó ya la época de inicio del CD. Nunca tuve una colección decente de vinilos pero este Cd me enseñó a amar un poquito más esta obra sublime.
EliminarEsta novena es sencillamente excelente. Aún hoy la escucho en vinilo, por recordar viejos tiempos. Saludos.
ResponderEliminarUna enorme, genial, irrepetible e imprescindible interpretación, muy especialmente por el primer movimento. El tercero, siendo bellísimo, no se encuentra a semejante altura. El cuarteto vocal, sin duda el mejor jamás escuchado. ¡Pero mucho ojo! La edición que has puesto amputa la repetición del segundo movimiento para que cupiera en un CD de los primeros tiempos. La siguiente edición en compacto ya ofrecería la grabación completa. Un cordial saludo.
ResponderEliminarGracias por el comentario querido Fernando y el detalle. Un fuerte abrazo querido amigo.
EliminarMuchas gracias, querido Julio!!
EliminarA disfrutar Guiller.
EliminarQuerido Fernando en cuanto pueda subo el otro disco. Un abrazo.
Estimado Julio Salvador.
ResponderEliminarImpresionante versión de una obra sublime....Un verdadero placer haberla escuchado. Otra joya para este extraordinario blog. Sin dudas K. Bohm un grande....Gracias por compartir tanta belleza....Jose
Gracias querido Jose. Particularmente me encanta. Y como decía nuestro amigo Fernando, y no he remarcado este aspecto lo suficiente, un cuarteto vocal sublime, cierto, muy pero que muy difícil de igualar.
EliminarUn abrazo querido Jose.
Querido Julio,
ResponderEliminarEsta Novena de Beethoven me trae muy buenos recuerdos porque, al igual que te sucede a ti, fue también mi primera "Novena" y le tengo un cariño especial (luego viniero muchas otras, para conocer mejor la obra). Se la tacha de "lenta" pero a mí en ningún momento se me hace pesada, todo lo contrario: tiene un ritmo interior soberbio y es ideal para descubrir infinidad de matices, de sutiles detalles de la partitura.
Gracias por ponerla a disposición de los que no la conocen.
Un abrazo,
Fernando.
Muchas gracias querido Fernando. Ciertamente es así, una interpretación llena de matices y bellísima.
EliminarQuisiera pedirte un favor ¿me puedes escribir a juliobelda@gmail.com y te lo comento? Gracias.
Julio, no sé si has tenido la oportunidad de escuchar la grabación de la Primera Sinfonía de Brahms que hizo el maestro Böhm con la Orquesta Filarmónica de Berlín en el año 1959 (Deutsche Grammophon); otra perla que nos dejó el maestro, que puede codearse sin pudor con las grandes.
ResponderEliminarQuerido amigo Melómano, no, no y es una pena pues todo el mundo habla maravillas de ella. ¿Alguna posibilidad de tenerla?
EliminarQuerido Julio. Dame algo de tiempo para ripearla y subirla (voy a estar unos día de viaje por motivos de trabajo). Ya te digo algo.
ResponderEliminarClaro que sí querido Melómano. Muchas gracias. Te he contestado al correo.
EliminarInmensa gratitud y admiración hacia tu extensa dedicación constante. Gracias por preservar esta obra de arte, compañero Julio. Fue el primer CD que compró mi padre para probar su amplificador hace ya 30 años, y desgraciadamente se encuentra hoy desaparecido. Sin dudas una de las mejores interpretaciones de la novena.
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