Datos Personales

Mi foto
Sevilla, Andalucía, Spain
Contacto: correo electrónico que encabeza el blog. Se aconseja Chrome para la mejor visualización.

domingo, 16 de marzo de 2014

Tchaikovsky. Sinfonías y Obras Orquestales. Ormandy. Philadelphia Orchestra. 1962 a 1976.


Mis queridos amigos continuamos esta noche con la segunda entrada dedicada a la música del gran Tchaikovsky dirigida por el maestro Ormandy. 

Una segunda entrega que incluye la integral sinfónica y varias piezas orquestales en unas interpretaciones verdaderamente bonitas, llenas de fuerza, pasión y corazón amén claro está de pulcritud y precisión interpretativa y de una sonoridad bellísima de ese instrumento increíble que es la Philadelphia Orchestra.

En esta cajita de preciosos discos viene una de las pocas grabaciones completas existentes de la llamada Sinfonía nº 7 o Sinfonía en mi bemol del maestro ruso en la elaboración del compositor, también ruso, Semyon Bogatyrev a partir de bocetos del propio Tchaikovsky y de otros trabajos de orquestación de Taneyev sobre material de Tchaikovsky. La obra se estrenó en Moscú en 1957 dirigiendo la Orquesta Filarmónica de la Región de Moscú Mikhail Terian y en Estados Unidos fue estrenada por el propio Ormandy y su Philadelphia Orchestra el 16 de febrero de 1962 realizando a continuación la primera grabación mundial de la misma (la presentada en esta edición de discos).

Espero que disfruten de esta colección de hermosísima música. Siempre es un verdadero placer deleitarse con Tchaikovsky y disfrutar de la verdadera magia sonora que Ormandy es capaz de extraer de sus músicos de Filadelfia.

En breve terminaremos las entregas con los discos dedicados a los Conciertos para Piano y el Concierto para Violín.




Tchaikovsky
Sinfonías
Obras Orquestales

Eugene Ormandy
Philadelphia Orchestra
Obertura 1812
Temple University Choirs, Robert Page, director
Electronic Cannon, Bells, Philadelphia Brass Bands
Variaciones Rococó, Leonard Rose, chelo


Grabaciones

Sinfonía nº 1, Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 11 de octubre de 1976
Sinfonía nº 2, localización desconocida, 7 de enero de 1976
Sinfonía nº 3, Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 28 de octubre de 1974
Sinfonía nº 4, Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 9 de mayo de 1973
Sinfonía nº 5, Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 21 de marzo de 1974
Sinfonía nº 6, Academy of Music, Philadelphia, 25 al 28 de mayo de 1968
Sinfonía en Mi Bemol, Town Hall, Philadelphia, 11 de marzo de 1962
Sinfonía Manfred, Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 27 de octubre de 1976

Serenata para Cuerdas, Broadwood Hotel, Philadelphia, 10 de abril de 1960
Obertura 1812, localización desconocida, 16 de noviembre de 1970
Sólo el que conoce la Nostalgia, Town Hall, Philadelphia, 28 de febrero de 1966
Las Estaciones, Town Hall, Philadelphia, 8 de mayo de 1968
Marcha Eslava, Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 17 de febrero de 1972
Capricho Italiano, Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 16 de febrero de 1972
Francesca, Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 10 de enero de 1976
Variaciones, Philadelphia Athletic Club, Philadelphia, 15 de noviembre de 1962




CD 1, Sinfonías nº 1 y 2 - Ormandy





CD 2, Sinfonía nº 3 - Serenata - Ormandy





CD 3, Sinfonía nº 4 - Ob. 1812 - Sólo el que conoce la Nostalgia - Las Estaciones op 6/6 - Ormandy





CD 4, Sinfonía nº 5 - Marcha Eslava - Capricho Italiano - Ormandy





CD 5, Sinfonía nº 6 - Francesca da Rimini - Ormandy





CD 6, Sinfonía en Mi Bemol - Variaciones Rococó - Ormandy





CD 7, Sinfonía Manfred - Ormandy




lunes, 10 de marzo de 2014

Bruckner. Sinfonía nº 8. Stanislaw Skrowaczewski. Saarbrücken Radio Symphony Orchestra. 1993.


Mis queridos amigos, hace ya varios días que no dejaba nada en nuestro espacio. Una mezcla de falta de tiempo, tareas acumuladas y falta de inspiración o incluso un poquito de apatía. Vamos a ver si se va normalizando todo y volvemos a una actividad algo más regular. Para quien les escribe, la llegada de los calores y la época primaveral supone un esfuerzo anímico importante, a veces demasiado importante así que tendremos que trabajar en ello para estar a tono.

Y para esta entrada volvemos a una obra de mi adorado Bruckner, la Octava Sinfonía,  una obra que llevo escuchando varios días, de manera persistente, repetida. Y con cada escucha me llena más y más. Bruckner siempre llena tu ser de energía y vitalidad, de sosiego y paz, de grandeza y hermosura. 


Muchas veces he indicado que terminaría la entrega de esta integral, excepcional integral por cierto del maestro Skrowaczewski, y hoy damos un pasito más hacia ese fin. Cuando todas las entregas estén publicadas haremos una a modo de resumen con los enlaces correspondientes a cada sinfonía de manera que se puedan tener todas a mano.

Después de la entrega de una excepcional Séptima hoy les quiero recomendar con pasión e incluso vehemencia la escucha de esta recreación de la Octava. Un verdadero mar de emociones condensadas en poco más de una hora de música maravillosa, interpretada de manera soberbia por la orquesta de la radio de Saarbrücken; me atrevería a decir que quizá sea junto a la quinta y la novena, la sinfonía en la que de manera más evidente se puede percibir el valor de la misma (cuerdas hermosas, sutiles y delicadas, vibrantes y tensas, de sonoridad nítida y empaque realmente deslumbrante; metales poderosos y cálidos; maderas de extraordinaria belleza y con un rico color). Por otro lado nos encontramos con esa dirección fácil y nada estridente del maestro Skrowaczewski, una dirección que sabe poner en su sitio cada bloque temático de esta inmensa obra, que es capaz de dar valor al mínimo detalle como por ejemplo a unas simples notas de violín y clarinete en un hermosísimo tercer movimiento haciéndolo aún más hermoso de lo que ya es, que es capaz de manejar con sutileza y sin que se produzca el caos al conjunto orquestal en su totalidad y en sus partes para conseguir un movimiento final sencillamente digno de admirar, inmenso, intenso, poderoso y lo que quizá sea más bello: emotivo y simple en su grandeza.

La Octava de Bruckner es una obra casi imposible de acabar, una obra que tiene tanto que dar que es imposible que nos defraude. Siempre hay momentos que nos deja sorprendidos o que nos conmueve esa pizca de más suficiente para dejar tu corazón tocado. Una obra abierta a la expresión e idea de cada maestro que con su propia recreación nos puede entregar su particular visión de la inmensidad bruckneriana. Una inmensidad que nos llena, nos inunda, nos abrazo en nuestra totalidad para llevarnos a lo más profundo de nuestra alma de ser humano su incomparable fuerza y su variada belleza. Una obra que siempre nos deja un poquito "tocados" en nuestra humilde condición de persona sentimental.

Y esta preciosa recreación es la visión de Skrowaczewski, la suya propia, escueta, conmovedora, de tímbrica y empaque realmente impresionantes; de detalles marcados buscando la sencillez de la hermosura y la inmensidad de la profunda belleza de la música de Bruckner.


Espero que disfruten de ella queridos amigos.

Realmente una interpretación maravillosa en todos los aspectos.


Bruckner Sinfonía nº 8
Stanislaw Skrowaczewski
Saarbrücken Radio Symphony Orchestra 
Grabación:
Kongresshalle Saarbrücken, 8 y 9 de octubre de 1993
Versión de 1890 en Edición de Leopold Nowak de 1955





miércoles, 26 de febrero de 2014

Paco de Lucía. En Memoria de un Grande. 1947-2014. Hispanoamérica. 1967. 1969.


Descanse en Paz

La guitarra
Federico García Lorca

Empieza el llanto 
de la guitarra. 
Se rompen las copas de la madrugada. 
Empieza el llanto de la guitarra. 
Es inútil callarla. 
Es imposible callarla. 
Llora monótona 
como llora el agua, 
como llora el viento 
sobre la nevada. 
Es imposible callarla. 
Llora por cosas 
lejanas. 
Arena del Sur caliente 
que pide camelias blancas. 
Llora flecha sin blanco, 
la tarde sin mañana, 
y el primer pájaro muerto 
sobre la rama. 
!Oh guitarra! 
Corazón malherido 
por cinco espadas.




Paco de Lucía
Hispanoamérica

Guitarras
Paco de Lucía 
Ramón de Algeciras

Producciones de 1969 y 1967
1, 3, 5, 8, 10, 12 - 1969
2, 4, 6, 7, 9 y 11 de 1967

01. I. Quizás, quizás, quizás (3:15) - Osvaldo Farrés
02. II. Cielito lindo (2:40) - Popular
03. III. Yo vendo unos ojos negros (2:03) - Pablo Ara
04. IV. Siboney (2:46) - Ernesto Lecuona
05. V. Guadalajara (2:37) - José Guizar
06. VI. La flor de canela (2:34) - Chabuca Granda
07. VII. Malagueña salarosa (2:32) - Eldipio Ramírez - Pedro Galindo Galarza
08. VIII. Y todo a media luz (3:02) - Edgardo Donato
09. IX. Granada (2:47) - Agustín Lara
10. X- Alma, corazón y vida (3:07) - Adrián Flores Alván - V. Trejo
11. XI. Tomo y obligo (2:10) - Carlos Gardel
12. XII. La Paloma (2:19) - Sebastián de Iradier









domingo, 23 de febrero de 2014

Tchaikovsky. Música de Ballet. El Lago de los Cisnes. La Bella Durmiente. El Cascanueces. Romeo y Julieta. Ormandy. Philadelphia Orchestra. 1972. 1973. 1972. 1973.


Mis queridos amigos, esta noche quisiera dejar para el deguste de todos tres maravillosos discos con una música que se puede considerar, creo con total justicia y sin miedo a equivocarme, como una de las más bellas jamás escritas por cualquier compositor y en particular un ejemplo precioso del arte musical de nuestro querido Tchaikovsky. Tres discos con extractos de los grandes ballets del maestro ruso y de propina una interpretación soberbia y rotunda de la Fantasía Obertura Romeo y Julieta.

Una entrada a la que poco se le puede añadir con palabras. Música para el disfrute de los sentidos, para el goce del gusto, para las emociones, para la belleza y la sensibilidad. Si de alguna manera la música puede transmitir belleza tienen en este caso un ejemplo perfecto de lo que es. Sinceramente pocos compositores han tenido el talento melódico, el ritmo, el encanto, la elegancia, la sutileza y la capacidad de armonizar todo ello en un bloque musical perfecto y sencillamente mágico como lo tuvo Tchaikovsky.


Sencillamente quiero que disfruten de la hermosura que emana de estos sonidos, que sueñen con aquello que su imaginación les ofrezca, que se deleiten con la riqueza emocional de estas partituras y que relajen sus ánimos y ansiedades escuchando estos prodigios de belleza.

Una pequeña nota adicional, quizá demasiado pequeña, para referirme a la interpretación por parte del maestro Ormandy y su Philadelphia Orchestra: indescriptiblemente buenos. Elegantes, ricos en expresividad, líricos, danzables, precisos, de sonoridad exquisita y realmente deliciosa, con un manejo de los ritmos sensacional, una limpieza de trazo única, sensualidad, chispa u opulencia según los momentos y con un alma muy, muy especial a la hora de recrear la bella y a la par difícil música del maestro Tchaikovsky. Y esto es muy importante mis queridos amigos, Tchaikovsky necesita alma para poder expresar todo su valor impreso en simples notas, alma para hacer aflorar su emoción y su poderosa vitalidad; alma para que su pócima encantada no llegue a empapar y quedar bañados en ella somo si un baño de sol nos diéramos, un sol que nos da la vida y nos despierta a ella.

Mis queridos amigos, para todos ustedes la magia de la música de Tchaikovsky, una música para abrir corazones y hacer sentir, y sentir mucho y profundamente, que no es poco. Absolutamente convencido de que van a disfrutar enormemente de estos discos, música verdaderamente mágica y pura delicia para el sentimiento y la emoción.

Perlas sonoras son sus notas
inundan mi corazón y mi ser,
tal inmenso placer me dan
que ni quiero ni puedo ocultar
que emanan por mis ojos
suaves lágrimas que al caer
como diamantes de amor
observo de ellas florecer 
rosas de pasión.

(A mi amigo Jose, gran amante de Tchaikovsky, con todo mi cariño).

Incluyo unos enlaces en los que puede ampliarse la lectura sobre estas tres obras de arte (Wikipedia).


Retrato de Ormandy


Tchaikovsky
Extractos de Ballets
El Lago de los Cisnes
La Bella Durmiente
El Cascanueces
Obertura Fantasía Romeo y Julieta
Eugene Ormandy
Philadelphia Orchestra
La Bella Durmiente, Norman Carol, violín

Grabaciones

El Lago de los Cisnes
Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 26 y 27 de septiembre de 1972

La Bella Durmiente
Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 15, 16 y 23 de enero de 1973

El Cascanueces
Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 25 y 26 de septiembre de 1972

Romeo y Julieta
Scottisch Rite Cathedral, Philadelphia, 23 de enero de 1973





CD1 El Lago de los Cisnes







CD2 La Bella Durmiente







CD3 El Cascanueces - Romeo y Julieta







viernes, 21 de febrero de 2014

Beethoven. Obertura Egmont. Concierto para Piano nº 3. Sinfonía nº 5. George Szell. Emil Gilels. Salzburgo. Orquesta Filarmónica de Viena. 1969.


Queridos amigos esta noche actualizamos una de las entradas que más visitas ha tenido en Sentidos. Una entrada de los inicios de este espacio allá por febrero de 2010, posteriormente actualizada en octubre de 2012 y que de nuevo volvemos a colocar en portada de este nuestro espacio, con el contenido original y alguna actualización fotográfica, por su especial valor, su enorme calidad técnica, musical y emocional. 

Un disco realmente soberbio, maravilloso, espectacular. Un Beethoven como pocos podrán escuchar y unos intérpretes y ocasión irrepetibles.

Que disfruten de ella.

29 de octubre de 2012

Queridos amigos esta entrada fue publicada originalmente el 1 de febrero de 2010. Con motivo de la renovación de los archivos me ha parecido oportuno que en lugar de publicarla como nueva actualización, la volvamos a poner al frente de este espacio. Quizá sea una opción que siga en adelante con otras grabaciones y entradas iniciales que estoy reponiendo y que quedan algo relegadas a aquellos que están suscritos a los comentarios o entran a menudo en la página de Nuevas Actualizaciones. Podría ser una forma de darles de nuevo vida y ofrecerlas a los nuevos amigos que han entrado recientemente a este nuestro espacio.

Es un disco realmente portentoso, maravilloso, excepcional. Como verán muchas frases están dichas en aquellos momentos iniciales de la andadura de este blog, por ejemplo la referencia que se hace a Furtwängler ...del que ya hablaremos...y podrán ver que entonces era un poquito más parco en palabras lo que no sé si es mejor para los sufridos seguidores de Sentidos ya que últimamente me extiendo demasiado y a veces me repito en los calificativos (sencillamente me cuesta encontrar otros) pudiendo llegar a ser un poquillo plomazo.

Además, debo reconocerles que mientras preparaba el archivo FLAC (en esta ocasión totalmente recomendable) estaba escuchando el disco en Mp3 y sinceramente estaba asombrándome por momentos de la extraordinaria energía, intensidad y magnetismo que tiene esta grabación. Creo que merece la pena volver a destacar este disco y que no quede olvidado como una referencia actualizada. 

Ya nos indicarán qué les parece queridos amigos.



La entrada original de febrero de 2010 se iniciaba así:

Estimados amigos, entramos en otra dimensión.

Beethoven por Szell, grabación en directo, al piano Gilels, Salzburgo, Filarmónica de Viena.

Una conjunción de personas, lugar, fecha y orquesta que da como resultado una grabación absolutamente impresionante, irrepetible y que os dejará verdaderamente conmovidos e impactados. Una delicia para los oídos, una sonoridad espectacular ¡qué toma de sonido más absolutamente excepcional! que forma de percibir las dinámicas, los timbres, las individualidades sonoras.

El concierto para piano supera ampliamente a la grabación en estudio de EMI con Cleveland y el mismo Gilels y se acerca muy mucho a la deliciosa y viva grabación de CBS con Fleisher y Cleveland. Pero, insisto, esta toma sonora impacta.

En cuanto a la Quinta Sinfonía, no sabría qué decirles. Para mí, la mejor de cuantas he escuchado, Furtwängler aparte, del que ya hablaremos, junto a la de Kleiber y la Orquesta del Concertgebouw pero con una diferencia: los vieneses están desenfrenados, casi como años antes lo estaban los músicos de Dresde en la interpretación de esta preciosa sinfonía. Un tercer movimiento fantástico con una transición al movimiento final y una conclusión que necesita un reposo cuando terminas de escuchar la obra para decir ¡Dios mío, qué pena no haber estado allí!

Y como entrada y aperitivo una Obetura Egmont maravillosa, dinámica, sonora, impactante, viva, impresionante y poderosa. 

Un disco excepcional, un testimonio de unos conciertos y de una época que son irrepetibles.



Beethoven
Obertura Egmont 
Concierto para Piano nº 3
Sinfonía nº 5
Emil Gilels, piano
George Szell
Orquesta Filarmónica de Viena
Grosses Festpielhaus Salzburgo, 24 de agosto de 1969
Orfeo D'Or