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sábado, 20 de octubre de 2012

Brahms. Furtwängler. Actualizaciones de Entradas. Grabaciones EMI.


Queridos amigos dejamos hoy en la página de Nuevas Actualizaciones las correspondientes a las grabaciones realizadas por el maestro Furtwängler para EMI. Incluyen las Sinfonías, el Réquiem Alemán, los Conciertos para Violín y el Doble Concierto y algunas piezas menores como complemento.

Una excepcional colección de obras con un altísimo nivel musical, verdaderas joyas de la música. En breve se actualizará la Sinfonía nº 1 con la que debería ir en la caja (el CD de la caja de EMI trae otra grabación, 1952, diferente a la referenciada en sus notas, 1947). Independientemete de ello, las interpretaciones de todas las obras son excepcionalmente bellas, magistrales, una verdadera maravilla de la dirección orquestal.




Brahms y Furtwängler
Grabaciones EMI

















Mahler Centenario. Actualizaciones de Entradas.


Queridos amigos hoy dejamos en la página de Nuevas Actualizaciones el conjunto correspondiente a las entradas que publicamos con ocasión de la celebración del Centenario de Mahler.

Espero que vuelvan a disfrutar de esta recopilación de aquellas interpretaciones que han representado algo especial para mi. El trabajo tuvo la participación de todos los lectores y de muchos espacios amigos de los que se tomó información musical e histórica, sugerencias, datos, etc. Se elaboraron unas tapas frontales especiales que en esta actualización sustituyo por  las de los CD originales aunque se mantienen en las entradas correspondientes.


Actualizaciones Mahler Centenario






















































miércoles, 17 de octubre de 2012

Tchaikovsky. Concierto para Piano nº 1. Celibidache. Barenboim. Münchner Philharmoniker. 1989.


Queridos amigos completamos hoy una tarea que había quedado pendiente desde hace ya varios meses. El CD triple con las grabaciones de las Sinfonías nº 4, nº 5 y este hermosísimo Concierto para Piano de Tchaikovsky en las manos de dos verdaderos genios de la música: Celibidache y Barenboim.

Aprovechamos la ocasión para actualizar las entradas correspondientes a las grabaciones de las sinfonías y dejar así completo este trabajo. Verdaderamente merece la pena. 

Si han tenido la oportunidad de escuchar las dos sinfonías referidas habrán podido degustar una verdadera ambrosía musical. Si lo hacen ahora estoy convencido que les va a encantar. 

A este triple disco siempre le he tenido un cariño especial y concretamente muy especial a esta grabación en directo del hermoso y sublime Concierto para Piano nº 1. Es conocido de todos la verdadera admiración mutua que se tenían ambos músicos. Barenboim adoraba al maestro Celibidache por muchas razones, básicamente por su concepción del momento musical como expresión suprema del arte. Celibidache admiraba a Barenboim por su flexibilidad y su enorme capacidad de asimilar su visión musical sin olvidar que estaba ante el que quizá haya sido el más grande pianista que haya existido. Ambos trabajaban de forma fácil, compenetrados, con una visión única encaminada a la belleza de la interpretación del concierto. Sin tiranteces, sin rigidez, con vía libre para la expresividad y Barenboim tenía la capacidad musical, de pensamiento y humana para acompañar a la dirección de Celibidache, una dirección ya muy particular en sus últimos años. Y decir eso, es decir mucho. Pocos solistas se atrevían con el maestro es estos años en que su ralentización de tempos, su idea del concepto sonoro y espacial se estaba radicalizando. Muy pocos.

En el disco que dejamos hoy podrán apreciar lo que les indico. Un Barenboim pletórico, poderoso, fácil en su toque, técnicamente ejemplar, musicalmente espectacular. Y un Celibidache que aún adoptando unos tempos que nos pueden parecer amplios jamás deja caer la música en situación de tedio o aburrimiento. Es más logra impulsarla con una poderosa fuerza interior que parece emanar de un más allá musical revelado y en ese impulso no lleva de la mano al pianista, simplemente caminan juntos. Es una interpretación de dos que son una unidad. 


Los detalles que Celibidache saca a relucir de la partitura tienen momentos mágicos, la forma en que aclara a la orquesta para potenciar al piano es antológica y más antológico es ese piano intenso, brillante, perfecto, delicado y poderoso a la par de Barenboim. Quizá no sea en una primera escucha uno de los más brillantes y llamativos que se hayan grabado pero su audición atenta y repetida te va haciendo admirar cada vez más el arte de estos dos músicos y cómo son capaces de transformar una obra archiconocida en una obra nueva. Sin demasiados alardes de virtuosismo para la galería, lo que vas apreciando es el viaje supremo al placer musical. Te suena todo, todo sabes como es pero te va sorprendiendo y poco a poco dices internamente, sí, así es pero...esto tiene más, más sentido, más profundidad, más alcance, más finalidad. Y aprecias los preciosos equilibrios sonoros que se establecen entre la masa orquestal, los instrumentos solistas (excepcionales, de verdad sobresalientes) y el piano y ves como ese equilibrio llega a mantenerse a lo largo de toda la interpretación, sin bajar nada su intensidad, su belleza sonora y su majestuosidad. Es un verdadero placer sonoro, un deleite para nuestro corazón un verdadero bálsamo musical para nuestros sentimientos más íntimos.

Una interpretación realmente diferente, puede gustar o no, pero es maravillosa. Escúchenla varias veces por favor. Disfrutarán de un concierto realmente soberbio. A la altura de lo que merece ese genial, maravilloso e irrepetible Tchaikovsky.


Querido Jose, sé que amas la música de Tchaikovsky. No vas a sentirte defraudado al escuchar este disco.
Querido Alejandro, lo disfrutarás.
Queridos Gabor y nvc365, lamento la tardanza.
Estimados todos, les dejo con una obra de arte.
Añadir que la calidad sonora de la grabación es maravillosa sin que impida en modo alguno la apreciación de los detalles tanto orquestales como solistas.



Tchaikovsky
Concierto para Piano nº 1

Sergiu Celibidache
Daniel Barenboim
Münchner Philharmoniker

Grabación
Ingelstadt, 16 de septiembre de 1989










Se recomienda visitar también las otras entradas del CD:



lunes, 15 de octubre de 2012

Haydn. Sinfonías nº 44, nº 48, nº 95, nº 98, nº 100 y nº 101. Ferenc Fricsay. RIAS-Symphonie-Orchester Berlin. 1951. 1953. 1954.


Estimados amigos, hace no muchos días un comentario de un lector anónimo preguntaba por la posibilidad de ofrecer unas sinfonías de Haydn grabadas por el gran maestro Fricsay. No tenía esas grabaciones aunque comenté la posibilidad de lograrlas. Hoy me gustaría compartirlas con todos ustedes. Unas grabaciones realizadas en los años 50 del pasado siglo por Fricsay al frente de su orquesta de la RIAS. Y debo comentarles que ha merecido la pena. Hacía tiempo que no disfrutaba tanto con un disco nuevo, con algunas obras desconocidas por mi (no he podido escuchar todo el sinfonismo de Haydn), obras que me han resultado hermosísimas y llenas de belleza. 

Conocía la magnífica aproximación global del maestro a la obra de Mozart y presuponía que no debía estar muy lejos en su concepto y calidad la aproximación a Haydn. Y simplemente no me ha defraudado (es difícil que Fricsay me defraude, la verdad). 

Los comentarios generales de las obras proceden de la Wikipedia (no he tenido tiempo para profundizar más en detalle) y espero que aunque simples y cortitos puedan ilustar algo de la historia de estas preciosas sinfonías clásicas de Haydn. Cualquier indicación o aporte será bienvenido.



La Sinfonía nº 44 fue compuesta en 1772. Popularmente es conocida con el nombre de Fúnebre. El propio maestro indicó al final de su vida que se tocara el movimiento lento en su funeral (y desde luego hay que alabar su elección, resulta estremecedor y emotivo). Es una sinfonía característica del periodo de Sturm und Drang de Haydn.

La Sinfonía nº 48 fue compuesta entre 1768 y 1770 y recibe el sobrenombre de María Teresa ya que parece que fue compuesta para la celebración de la visita de la Emperatriz del Sacro Imperio Romano Germánico, María Teresa I de Austria. Es una sinfonía hermosa, intensa, poderosa y grande siendo una de las sinfonías de Haydn de este periodo que sobrevivieron a lo largo del Siglo XIX en varias ediciones.

Las Sinfonías 95, 98, 100 y 101 se integran en la serie de las Sinfonías Londres compuestas por Haydn.

La nº 95 es la tercera de la serie (93-104) y fue completada en 1791 para ser interpretada en el primer viaje a Londres. Se estrenó en las Hanover Square Rooms de Londres en la temporada de 1791. Es característico de ella que no comienza con una introducción lenta en el primer movimiento y que en su Menuetto destaca un bellísimo y conmovedor solo de violonchelo.

La nº 98 es la sexta de la serie de las Sinfonías Londres, se completó en 1792 como parte también de la serie de sinfonías compuestas para el primer viaje a Londres y se estrenó también en las Hanover Square Rooms de Londres el 2 de marzo de 1792.

La Sinfonía nº 100, octava de la serie londinense se completó en 1793 ó 1794 y es popularmente conocida como la Sinfonía Militar por su segundo movimiento con llamativas fanfarrias para trompetas y notables efectos de percusión.

La Sinfonía nº 101, novena de la serie, es popularmente conocida como la sinfonía El Reloj por su precioso ritmo de tic-tac del segundo movimiento. La obra se completó en 1793 ó 1794 siendo compuesta para la segunda visita a Londres (1794-1795) de Haydn.


Tras este pequeño repaso histórico no me queda más que comentar mi asombro por la preciosa ejecución global de Fricsay de estas obras de Haydn; obras llenas de humor, de vitalidad, de frescura, de sorpresas, de juegos musicales, de belleza instrumental, de sonido clásico absolutamente mágico y sencillamente hermoso.

Un Fricsay que se acerca con su maravillosa orquesta de la RIAS de una forma directa, fresca, intuitiva, plena de matices, con toques de frescura, de emoción, a unas sonoridades y melodías que Haydn llena de sensualidad, belleza, fuerza, humor, plasticidad, ritmo, timbres y colores sencillamente asombrosos.

Y todo ello lo logra, siendo digno de destacar, con la genial y majestuosa participación de una orquesta plena de matices, con una capacidad de clarificar las texturas, de exponer los temas, de expresar los sentimientos, de llenar las notas de valor, de color y de belleza como pocas pueden hacerlo. La RIAS-Symphonie-Orchester de Berlin es un instrumento sencillamente asombroso para la interpretación precisa, fresca, sutil y directa de esta hermosa música.

Espero que disfruten de estos hermosos discos. Sinceramente me han convencido, me han dado un placer enorme, merecen la pena. Son una muestra más del soberbio y siempre poco valorado arte de ese maestro y gran ser humano que fue Ferenc Fricsay.
Dedicado a todos los amigos de este modesto espacio, a todos aquellos que admiran a Fricsay, a los que disfrutan con la hermosa música de Haydn y en particular a ese amigo anónimo que las solicitó.





Franz Joseph Haydn
Sinfonías nº 44, 48, 95, 98, 100 y 101

Ferenc Fricsay
RIAS-Symphonie-Orchester Berlin

Grabaciones
Berlín, Jesus-Christus-Kirche

Sinfonía nº 44 "Mourning", 20 de junio de 1953
Sinfonía nº 95, 8 y 9 de septiembre de 1953
Sinfonía nº 98, 14 y 16  de septiembre de 1954
Sinfonía nº 48 "Maria Theresia", 30 de agosto y 1 de septiembre de 1951
Sinfonía nº 100 "Military", 4 de mayo de 1954
Sinfonía nº 101 "The Clock", 18 y 19 de septiembre de 1951





(Contraportada elaborada, disco no físico de tienda internet)


Disco 1, Sinfonías nº 44, nº 95 y nº 98



Disco 2, Sinfonías nº 48, nº 100 y nº 101



domingo, 14 de octubre de 2012

Johann Sebastian Bach. Sonatas para Viola da Gamba y Cémbalo. Pau Casals. Paul Baumgartner. 1950. Concierto de Brandeburgo nº 5. Pau Casals, Eugen Istomin, Joseph Szigeti, John Wummer. Orquesta del Festival de Prades. 1950.


Queridos amigos, después de varias horas de actividad algo pesada, por eso de las subidas al servidor y demás temas informáticos, me apetecía tomar un descansito musical previo al que luego vendrá de tipo físico y espero que mental. Hace unos días estaba de viaje y en una visita a un centro comercial para ver su departamento de música encontré esta pequeña joya. Y digo pequeña por el coste unos escasos 3,25 euros. Pequeña en precio pero grande en calidad de presentación (preciosa caja para el disco) y muy, muy grande en calidad musical.

Ya es sabido por nuestros amigos que Bach me cuesta pero me debo quitar el sombrero ante estas tres piezas, estas preciosas, delicadas, increíblemente bellas y emotivas Sonatas para Viola da Gamba y Cémbalo del maestro Bach. Tres obras monumentales de la música, tres verdaderas joyas para adornar el corazón más anhelante de paz, serenidad, belleza, armonía y equilibrio.

Las tres Sonatas para Viola da Gamba posiblemente fueron compuestas entre los años 1717 y 1723 durante la estancia de Bach en Cöthen y posiblemente escritas a la forma del prestigioso gambista del Príncipe Leopoldo: Christian Ferdinand Abel. Se cree que no fueron publicadas hasta los años 1966 y 1867 en Leipzig. Este periodo de Bach en la corte de Cöthen fue sumamente provechoso ya que del mismo datan las Suites Orquestales, las Sonatas y Partitas para Violín, los Conciertos de Brandeburgo y las maravillosas Sonatas para Violonchelo. ¡Qué conjunto de obras verdad!

No había escuchado estas sonatas para Viola da Gamba. Pero hasta hacerlo no he sabido lo que me he perdido. Una música excepcionalmente bella, delicada, llena de hermosura, de diálogos increíblemente bellos entre los dos instrumentos. Un música llena de profundo sentimiento de paz, de serenidad, de simple tranquilidad y de sosiego. 

Y debo reconocer que me he quedado prendado del maravilloso juego musical que establecen Baumgartner y Casals. Absolutamente magistrales, ambos emprenden un viaje musical que transita por la pura belleza de las notas, esa belleza que sólo se consigue cuando enlazadas y dotadas de vida de la forma adecuada te trasladan a un mundo que no es el terrenal. Estás un poquito más allá, llámenle cielo, paraíso, limbo, nube, o lo que mejor les apetezca. 

La manera en que dos maestros, porque para tocar así han de ser no sólo músicos sino maestros en todo, en lo musical y en lo humano, logran integrarse para ofrecernos su Bach es para que quede en los anales de la más alta categoría musical. Un verdadero placer.




El disco incluye también el Concierto de Brandeburgo nº 5 en compañía de algunos de sus amigos habituales del Festival de Prades, Szigeti, Istomin y Wummer que se integran a la preciosista Orquesta del Festival de Prades para ofrecernos un maravilloso, sereno, vivo, dinámico y apasionado Concierto nº 5.

Impagable la labor de todos estos músicos que apoyaron al maestro Casals en su empreño de seguir haciendo música a pesar de su lucha interior, de sus decepciones vitales y humanas. La Música tiene con todos ellos una deuda que creo es impagable; sumemos a Schneider y a Horszowski como verdaderos patrones de este precioso barco que fue Prades y a los muchos amigos de todos ellos, como Haskil, Stern, Fuchs, y otros muchos más sin los que ese sueño de Casals de un Festival Bach no hubiera tenido lugar. Y gracias a ellos hoy podemos ser admiradores de una etapa musical sin precedentes y que jamás será igual. Porque amigos míos, escuchando estas grabaciones, al menos yo entiendo que será difícil, muy difícil, encontrar las circunstancias personales, históricas, humanas y de ánimo para que Bach vuelva a sonar así.






Que disfruten de un arte irrepetible. Yo he logrado un estado de serenidad maravilloso, enormemente agradable. Un estado de tranquilidad, de paz, de calma y sosiego que pocas cosas puede lograr que llegue a él.


Johann Sebastian Bach

Sonatas para Viola da Gamba y Cémbalo
Pau Casals
Paul Baumgartner
Prades, junio de 1950

Concierto de Brandemburgo nº 5
Pau Casals
Eugen Istomin
Joseph Szigeti
John Wummer
Orquesta del Festival de Prades
Prades, junio de 1950